Una elección distinta
En el papel, el plebiscito del 4 de septiembre no tiene referente, al menos desde el regreso a la democracia. Esta elección será la primera vez, desde entonces, en la que todos los ciudadanos mayores de 18 años estarán obligados a votar.
Además, según han recalcado algunos expertos en Derecho, la propuesta entregada por la Convención Constitucional podría convertirse en la primera Constitución redactada de manera democrática en nuestro país. Como señala Salinas, “lo que estamos viviendo ahora es un proceso sin precedente en la historia de Chile”.
“Estamos en un momento de incertidumbre y, socialmente, esto provoca ansiedad, estrés, sensación de incomodidad social”, acusa el psicólogo. La salud mental, en medio de este período pre-plebiscito, se ve presionada aún más por ser una situación inédita para la gran mayoría.
Sin embargo, el académico asegura que los niveles de ansiedad nuestra sociedad ya han estado igual de altos. “Desde una perspectiva sociopolítica, me parece que el plebiscito que vamos a enfrentar ahora, para las personas que tienen más de 50 años, rememora mucho las situaciones vividas con el plebiscito del año 89”.
Rossi concuerda con esta idea, apuntando a que “el contexto de esta elección en nuestro país es particular. Uno siente que a lo mejor el 73 está lejano, pero en realidad no. Es una historia muy reciente, donde se pueden aparecer estos fantasmas. Es muy comprensible que la gente la viva con particulares niveles de ansiedad”.
Sin embargo, como insiste Gillibrand, “esta incertidumbre tiene una fecha”. “Se produce la sensación de que esa fecha es como el veredicto, el juicio final. Eso está provocando mucha ansiedad, y se presta para pensar que, de ahí para adelante, cambia Chile”, dice el psiquiatra.
“La ansiedad va a seguir en ascenso hasta ese día y, después, vamos a quedar como en ‘el día después de’. ¿Qué pasa ‘después de’? Eso nos da mucha incertidumbre. (…) Nos hemos llenado de mucha información y eso produce mucha ansiedad en la gente, porque nadie tiene claro qué va a suceder después”, recalca.
Como resume Salinas, “hay una perspectiva muy catastrófica. Son procesos evolutivos dentro de las sociedades que conllevan fricción. Todo cambio implica una crisis, eso genera ciertos resentimientos o debilitamientos en las formas de entender las estructuras sociopolíticas de un país. Pero me parece más bien que son procesos normales de evolución de los países”.
Surfear la incertidumbre del plebiscito
Un diagnóstico general que hacen los expertos en torno al momento que está viviendo la salud mental de los chilenos de cara al plebiscito es la incapacidad de enfrentar la incertidumbre.
De acuerdo con Alejandra Rossi, aún es complejo saber si saldremos indemnes mentalmente de esta elección. “Va a depender mucho de los resultados y de nuestras propias preferencias políticas. El lado que gane en las elecciones se va a sentir bastante mejor que el lado que no”.
“Para cualquier caso, es una apertura para nuevas incertezas. Lo que nos está enseñando este tiempo, creo yo, es a lidiar con la incertidumbre, a lidiar con los cambios”, dice. Y diagnostica que “va a afectar de maneras distintas a personas distintas. A mí no me extrañaría que siguiera un poco el nivel de estrés post-elección”.
En este aspecto, agrega Salinas, este sentimiento de constante sospecha entre los ciudadanos de cara a la elección “es por la falta de confianza”. Como señala el psicólogo, “no hay percepción de objetividad en torno a la información que se está transmitiendo. Hay un exceso de información, pero falta de comunicación”.
Con ello, apunta a los constantes debates y enfrentamientos que están ocurriendo en la vida diaria en torno a este tema. En sus palabras, sentimos que estamos “viviendo en una sociedad muy polarizada, en extremos, que está tendiendo poco al diálogo. En redes sociales se aprecia bastante agresión y violencia”.
Según expone Gillibrand, la ansiedad nos está afectando porque, como seres humanos, “queremos tener certezas para hacer planes, pero eso se ha visto trastocado”. Así, dice en sus palabras, vamos a tener que aprender a «surfear la ola».
“Cuando estamos en la ola, hay que surfear para no caerse. No tenemos que correr despavoridos, no tenemos que hundirnos, tenemos que tener una cualidad de observación, de templanza, de calma. De espera, quizás”, explica el psiquiatra.
¿Cómo «surfeamos la ola»? El médico dice que la clave es no polarizarse y “no pensar en que el 5 de septiembre va a ser el apocalipsis. Esto no es el juicio final tampoco. Los que pueden pensar que esto va a ser el acabose no están surfeando bien la ola, porque eso va a aumentar mucho más su ansiedad”.
Y recuerda que los ánimos crispados son, principalmente, por esta elección. “Cuando salgan visiones más moderadas al respecto, diciendo que los cambios no van a ser radicales, que habrá que hacer reformas sobre reformas, eso va a producir que la gente se tranquilice”.
Cuidar a niños, niñas y adolescentes
Aunque no lo queramos, niños, niñas y adolescentes del hogar están expuestos a casi la misma información que nosotros. Con eso, todo este ambiente previo al plebiscito puede impactar en su salud mental de la misma manera que en la nuestra.
Como destaca Rossi, “el nivel de ansiedad que uno le puede transmitir a niños, niñas y adolescentes puede ser muy grande”. “Los niños tienen que ser siempre factor de protección en estas circunstancias. No comparto que niños se utilicen para campañas y propaganda política, ética y moralmente es absolutamente cuestionable”, agrega Salinas.
Gillibrand apoya esta idea. “El camino de la polarización es muy nocivo para la salud mental de los niños. Lo que se está haciendo, la Constitución para los próximos años, es para nuestros hijos, para los adolescentes actuales”, apunta el médico.
“Lo que tenemos que ver es que no sólo les estaríamos dejando una Constitución, sino que también cómo manejamos las diferencias como adultos”, agrega. Y remata asegurando que “la polarización es la peor Constitución que le podemos dar a los niños”.
Para evitar que este estrés se infunda en ese grupo generacional, Rossi recomienda “tener ojo con el consumo, con la conexión constante y potenciar las comunidades, potenciar el apoyo social que uno puede vivir dentro de la comunidad. Hablar esto, tener o buscar espacios donde uno pueda sentirse en la posibilidad de conversar estos temas”.
Salinas agrega que es necesario “tener confianza en que, quizás, hemos creado una sociedad relativamente madura. Hay ciertas estructuras políticas que, aunque están con una confianza muy desmejorada, todavía son factibles de funcionar y hay una participación ciudadana mucho más activa”.
Medidas de autocuidado
Viendo que los niveles de estrés y de ansiedad no necesariamente bajarán una vez pasado el plebiscito, los expertos nos entregaron algunos consejos para cuidar nuestra salud mental.
Una idea en la que están todos los expertos de acuerdo es en “cultivar las relaciones”. Como explica Gillibrand, necesitamos ser “empáticos. Los seres humanos somos seres relacionales. Necesitamos a los otros para validarnos, para tener un sentido de nosotros mismos y de los otros, y hacer comunidad”.
“Suena cliché, pero es necesario ponerse en el lugar del otro con respeto, con cariño. Pensar que estas son simplemente situaciones de cómo vemos el país de aquí para adelante”, asegura el psiquiatra.
Por su parte, Salinas suma que hay que tener un cambio en el cómo vemos al resto. “Si el otro no piensa igual que yo, no tengo que verlo como un enemigo, sino como alguien que tiene una posición más o menos informada. Tenemos que entender que son procesos que se dan dentro de las sociedades”, dice.
Y agrega que hay cuatro factores clave para combatir el estrés: dormir bien, hacer actividad física, conectarse con la naturaleza y comer sano. “Otras más definidas son poder hacer prácticas de algún tipo, contemplativas, meditativas como yoga o mindfulness, que apuntan a combatir el estrés”, sumó.
“Entre el sueño, la alimentación, la actividad física, cuidados diarios y mantener buenas relaciones sociales ya son cuatro buenos pilares para poder sostenerse”, sostuvo Salinas.
Finalmente, Rossi hizo un apunte para aquellos que están sobrepasados con el estrés y la ansiedad. “Ojo en el consumo de noticias, de medios, de redes sociales. Si vemos que nos pone ansiosos o ansiosas, es necesario desconectarnos un rato”.